La criminología es una de las rama de la sociología, cuyo objeto de estudio son las causas del crimen. Pero hoy día, la podemos entender como una disciplina que conjunta el conocimiento de las ciencias exactas y las ciencias sociales en beneficio de la preservación del estado de derecho.
¿Te fascinan las novelas de Sherlock Holmes, las series como CSI o los documentales acerca de asesinos en serie? Entonces la criminología puede ser una buena opción profesional para ti. Los criminólogos son los profesionales que se encargan de investigar las causas y motivos de un crimen. Estos profesionales buscan patrones de comportamiento con el objetivo de identificar posibles razones de un crimen, y que este conocimiento conduzca a posibles culpables. Para esto conducen investigaciones de campo y teóricas, buscan evidencia y desarrollan teorías que contribuyan a resolver delitos graves o aparentemente irresolubles.
Hay que acotar que la criminología no es lo mismo que la criminalística. La criminología se centra en el porqué del delito, buscando su razón, y la criminalística en el cómo fue ejecutado, es decir, busca establecer el modo de operación del criminal. En cierto sentido, la criminalística es una de las disciplina afín a la criminología. La criminología es un concepto complejo, en cuya práctica se examinan las causas y condiciones de manifestación del fenómeno criminal. Por otra parte, la criminalística se encarga de establecer la fenomenología exacta del hecho criminal, ya que su objetivo es establecer la serie de acciones criminales que componen un delito con la mayor precisión posible. La criminología es afín a las ciencias sociales; mientras que la criminología es una rama del derecho.
Etimología de criminología
«Criminología» se deriva de latín crimen, que literalmente significa “acusación”, y del sufijo de origen griego “logos”, que denota el estudio de una materia. Por tanto, “criminología” significa estudio del crimen.
El estudio criminológico
Los criminólogos abordan un vasto conjunto de tópicos relacionados con el crimen. No se limitan a estudiar las causas del delito sino también contextualizan su impacto psicológico y social. En esencia, los criminólogos observan y analizan el total de los aspectos del comportamiento criminal. Esto incluye el impacto del delito en las víctimas directas y colaterales, la sociedad en general e incluso los propios delincuentes en tanto individuos humanos. Algunas de las áreas específicas en las que se centra la criminología son:
- Frecuencia del delito.
- Extensión geográfica del delito.
- Motivos del delito.
- Clasificación del delito.
- Consecuencias sociales e individuales del delito.
- Reacciones sociales/culturales al crimen.
- Reacciones psicológicas al crimen.
- Reacciones jurídicas/cívicas al crimen.
Historia de la criminología
La criminología existe como “estudio del delito” desde las sociedades antiguas. Las culturas mesopotámicas, por ejemplo, fueron de las primeras en demostrar un interés por el estudio de la ley y su transgresión. El mayor desarrollo antiguo de la “teoría del crimen” se encuentra en las obras políticas y morales de los filósofos griegos Platón y Aristóteles. Por otra parte, la primera sociedad en aplicar conceptos criminológicos para la prevención y resolución de crímenes fue la romana, durante la República.
La criminología como disciplina científica surgió en Europa tras la ilustración, con el despunte de las ciencias sociales como investigación metódica de la realidad humana. El término fue acuñado en 1885 por el profesor italiano de derecho penal Raffaele Garofalo. Y posteriormente la ciencia criminológica fue desarrollada por los mismos italianos, franceses y luego ingleses. Más tarde también investigadores alemanes y estadounidenses extenderían este campo de conocimiento.
Escuelas de pensamiento criminológicas
El objetivo de la criminología es determinar las causas fundamentales del comportamiento criminal, y su utilidad es el desarrollo de medios efectivos y humanos para prevenirlo. Existen varias escuelas de pensamiento dentro de la disciplina, cada una de las cuales analiza los factores involucrados en el comportamiento criminal desde perspectivas distintas. Por lo tanto, cada una propone diferentes maneras de prevenir el crimen. Las tres escuelas más notables de pensamiento dentro de la criminología son la Escuela Clásica, la Escuela Positivista y la Escuela de Chicago.
Escuela Clásica
La criminología “clásica”, cuyo mayor autor es el teórico y jurista italiano Cesare Beccaria, quien propone una teoría de comprensión del crimen que postula cuatro conceptos fundamentales:
- Las personas tienen libre albedrío para tomar decisiones y actuar por su propia cuenta.
- La gente, por ley general, buscará la satisfacción y evitará el dolor, y calcularán racionalmente el costo contra beneficio de elegir cometer un acto sobre otro.
- La utilidad del castigo es evitar el crimen y no sancionarlo, y la severidad de este debe ser equiparable a la gravedad del delito imputado.
- La oportunidad e inevitabilidad del castigo son lo más importante para que este cumpla su propósito.
- Escuela Positivista
La Escuela Positivista sugiere que existen más factores que influyen en el comportamiento criminal además de la simple búsqueda de placer y la evasión del dolor. El positivismo supone elementos ambientales y psicológicos que suelen estar fuera del control del sujeto criminal. Incluye causas biológicas, sociales y culturales. La escuela positivista fue la primera en aplicar el método científico al estudio del comportamiento humano.
El mayor exponente del pensamiento positivista dentro de la ciencia criminológica es Cesare Lombroso, quien examinó las características fisiológicas de los delincuentes, principalmente la formas de los huesos del cráneo, para sugerir que la biología puede predisponer la tendencia al comportamiento criminal en ciertas personas. Por supuesto, la falsa ciencia médica de la frenología está desacreditada, sin embargo, la escuela positivista fue la primera en sugerir que el estudio del delito debe abordar el entorno en el que se produce el delito. Tesis fundamental de la criminología contemporánea.
Escuela de Chicago
También conocida como la Escuela Ecológica, la Escuela de Chicago se desarrolló por primera vez durante la década de 1920 en el departamento de sociología de la Universidad de Chicago. Esta escuela de pensamiento criminológico propuso la idea de que el comportamiento humano estaba, al menos parcialmente, determinado por la estructura social. Toma en cuenta factores psicológicos y ambientales al tratar de determinar las causas del comportamiento criminal.
La Escuela de Chicago señala que los seres humanos se adaptan a sus entornos. Un entorno social destructivo, como crecer en la pobreza, por ejemplo, conduce a un colapso en la estructura social. Este ambiente obstaculiza la capacidad de una sociedad para lidiar efectivamente con el crimen, que resulta y fomenta una mentalidad criminal en las comunidades marginadas por la estructura social.
Razones por las cuales estudiar criminología
El desarrollo de la criminología ha permitido mejorar los sistemas de justicia en la mayoría de las sociedades modernas, permitiendo un trato más sensible y eficaz en el tratamiento tanto de víctimas como de los mismos delincuentes. Ya que la criminología permite comprender mejor los costos reales del crimen para todos los involucrados y la sociedad en general.
La criminología ha abierto áreas de estudio aún más especializadas, incluida la criminología ambiental. También ha traído avances en tácticas y prácticas policiales, eficaces en contextos particulares o complicados, como la vigilancia de «ventanas rotas», la vigilancia orientada a la comunidad y la vigilancia predictiva.
Plan de estudios de la carrera en criminología
Ya que la criminología se encuentra dentro del cruce de varias disciplinas “mayores” del conocimiento humano, una carrera en criminología implica el estudio de temas provenientes de ramas como la sociología, derecho, psicología, administración de la seguridad pública, medicina forense, y ética. Así como la lectura y comprensión de las diferentes “teorías del crimen” que los criminólogos más notables han desarrollado desde el siglo XIX hasta nuestras fechas.
Perfil del estudiante de criminología
Debido al carácter interdisciplinario de la criminología, un buen aspirante a ingresar en esta carrera debe tener un bagaje fuerte en la mayoría de los ámbitos del conocimiento humano, particularmente en ciencias químicas biomédicas y ciencias sociales. Asimismo, una formación humanista es básica para la ética y capacidad para el pensamiento crítico que un buen criminólogo debe poseer. Finalmente, debe tratarse de una persona curiosa, de nervios resistentes, y con el interés y habilidad para analizar profundamente la evidencia.
Opciones profesionales de una carrera en criminología
Los derroteros profesionales de un egresado de la carrera en criminología son abundantes y variados. Obtener un título en el campo de la criminología puede abrir puertas a actividades académicas especializadas o estudios avanzados en áreas como la psicología forense, o proporcionar una base sólida para abordar una carrera dentro del sistema de justicia penal. Asimismo, las fuerzas policiales recurren más que nunca a la asistencia de criminólogos para la resolución de crímenes de alto perfil o casos cuya dificultad rebasa las capacidades normales de la policía.
Perspectivas salariales del profesional en criminología
Debido a la variedad de opciones de desarrollo profesional del egresado de la carrera en criminología, la perspectiva salarial del criminólogo abarca un espectro muy extendido. Según los registros estadísticos, el piso salarial del profesional en criminología se encuentra en 12 mil pesos al mes. Sin embargo, algunos profesionales pueden llegar a cobrar de 5 mil a 20 mil pesos por caso, en el supuesto de trabajar para un despacho o consultoría.